“Cada vez que hago una asociación errónea de mi persona, me convierto en mi propia rival”
Buenos días bella
Cuando uno decide iniciarse en el camino de su propio auto descubrimiento, nunca le sobran las preguntas. Se aleja de la superficialidad que le hace aparentar que todo está bien y deja de caminar por el camino del mártir.
Estar en bucle hacia lo que no cambia de tu vida sólo te hace tener mal humor, pesimismo y falta de acción.
Las envidias crecen cuando no te crees capaz de expresar belleza consciente. ¿Sabes a lo que me refiero cuando digo belleza consciente?
“Es ese tipo de belleza en el que está basado mi método”
Esta se basa en PODER transmitir las cualidades que necesitas aprender para superar alguna creencia que te desvalida y te hace creer que debes cambiar tu forma de ser. O también puede ser, que necesites reconocer los talentos que ya traes de serie y desde ahí comprobar sus puntos fuertes para armonizar y elevar tu confianza.
“Tú también envidias y todavía no lo sabes”
Decía Miguel de Unamuno que la envidia es mil veces peor que el hambre, porque es hambre espiritual.
En cada momento de tu vida en el que te crees más o menos que nadie, ya estás en la creencia de que eres carente de algo. Y es por ahí por donde se cuela la envidia, pues ya estás poseída por la creencia y necesidad de tener algo que tienen otros. Y aunque suena paradójico, la envidia está porque no quieres hacer el esfuerzo que conlleva tener aquel talento que ves en otros. Es más, si estuvieras en el aprendizaje, la envidia se esfumaría porque te darías cuenta de que ya eres poseedora de aquello que veías fuera. Sólo que expresado y utilizado con tu sello y estilo propio que es influenciado por tu identidad”.
Si a veces juegas a sentirte de más o de menos es porque hay algo de ti que te pide hacer un aprendizaje trascendente.
La carencia que nos lleva de la mano a envidiar tienes varios frentes abiertos:
- Te crees de menos porque te comparas con alguna característica de alguien y pierdes tu propia expresión porque crees que sacarla puede ser un problema.
- Te hace creer que eres más que nadie y piensas que no necesitas aprender de otras personas que tienen lo que más necesitas incorporar, para así convencerte de que lo que menos aceptas de ti no existe.
- Persigues algo que tienen otros y crees que sin ello no alcanzarás lo que necesitas ver y tener en ti y te impide crecer y evolucionar aquello que ya eres y traes de serie.
Feliz y próspero septiembre querida. El mes de los retos.
Abrazo.
